Efectos del estrés laboral en empresas

Debido a las exigencias del entorno laboral actual, es inevitable que exista presión en el trabajo. Un nivel de presión que el trabajador considere aceptable puede incluso mantenerlo en alerta, motivado y en condiciones de trabajar y aprender, dependiendo de los recursos de que disponga y sus características personales. El estrés aparece cuando esa presión se hace excesiva y difícil de controlar.

El estrés laboral puede provocar la aparición de comportamientos disfuncionales de la persona en su lugar de trabajo, pudiendo repercutir en el rendimiento y funcionamiento de la empresa.

 

Si usted está angustiado por cualquier cosa externa, el dolor no se debe a la cosa en sí, sino a su estimación de la misma, y esto tiene el poder de revocarse en cualquier momento.

Marco Aurelio

 

El estrés afecta de distinta forma a cada persona, maniféstandose con síntomas psicológicos y físicos que, si se prolongan, pueden derivar en distintos trastornos que provoquen absentismo laboral. Cuando un/a trabajador/a se encuentra sometido/a a estrés laboral, puede manifestar:

·Angustia, irritabilidad y cansancio
·Dificultad de concentración y de toma de decisiones
·Menor compromiso con el trabajo
·Problemas físicos graves
·Dificultades para mantener un equilibrio entre la vida laboral y persona

 

Una empresa que no goce de una buena salud, no puede obtener lo mejor de sus trabajadores/as y esto, en un mercado cada vez más competitivo, puede poner el peligro el buen funcionamiento de la empresa.
El estrés laboral puede afectar a las entidades de diversas maneras:

·Aumento del absentismo
·Menor dedicación en el trabajo
·Aumento de la rotación del personal
·Deterioro del rendimiento y la productividad
·Aumento de accidentes laborales
·Aumento de las quejas de usuarios y clientes
·Aumento de los problemas legales debido a las demandas de los trabajadores que sufren estrés
·Deterioro de la imagen institucional tanto entre sus empleados como en el exterior

 

En términos generales un trabajo saludable es aquel en el que la presión sobre el empleado se corresponde con sus capacidades y recursos, el grado de control que ejerce sobre su actividad y el apoyo que recibe. Un entorno laboral saludable no es únicamente aquel en el que existe una ausencia de circunstancias perjudiciales, si no una abundancia de factores que promuevan el bienestar global.

 

El estrés está causado por peligros relacionados con la definición y gestión del trabajo y con las condiciones laborales. Esos peligros pueden gestionarse y sus efectos pueden ser controlados, del mismo modo que ocurre con otros peligros.

 

Gloria Lorenzo

Bibliografía:
OMS. Organización Mundial de la Salud. La organización del trabajo y salud: Serie protección de la salud de los trabajadores, nº3. 2004.